¿Cómo se desarrolla el proceso de coagulación de la sangre?
La coagulación es el proceso por
el cual se forma un coágulo sanguíneo. Comienza en respuesta a una lesión en un
vaso sanguíneo. En el proceso de coagulación se producen una serie de
reacciones en cadena en las que participan varios tipos celulares y proteínas
solubles de la sangre con el objetivo de formar un coágulo para evitar la
pérdida excesiva de sangre.
Un coágulo consiste en una red de
proteínas insolubles como la fibrina con plaquetas y células atrapadas que
bloquea la salida de sangre hasta que se repare el tejido.
Se distinguen dos rutas de
activación de la cascada de coagulación conocidas como vía extrínseca y vía
intrínseca. Hacen referencia al lugar donde se inicia la cascada de
coagulación:
- Al interior de un vaso sanguíneo (intrínseca)
- Fuera de un vaso sanguíneo (extrínseca)
El proceso de coagulación se
puede esquematizar en las siguientes fases:
- Fase de iniciación En esta fase es fundamental la formación de pequeñas cantidades de trombina. La lesión de un vaso sanguíneo expone las proteínas solubles de la sangre a las células de los tejidos circundantes y a la matriz extracelular. Estos contactos van a generar una serie de reacciones que constituyen la fase de iniciación.
- Fase de amplificación En esta fase se produce la activación de las plaquetas gracias a la pequeña cantidad de trombina generada en la fase de iniciación. En esta fase factores en la superficie de las plaquetas provocan la producción masiva de trombina. La fase de amplificación tiene lugar sólo si la lesión permite la salida de plaquetas y del complejo VIII/vWF (factor von Willebrand).
- Fase de propagación En esta fase se produce trombina de forma masiva para la formación de un coágulo estable. También acuden gran número de plaquetas al lugar de la lesión. En esta fase sólo participan las plaquetas activadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario